El Telluride de Kia es un SUV más que completo, que justifica plenamente todos los reconocimientos que ha cosechado alrededor del mundo ¿Cómo se siente a un año de mover el mercado?
Por Juan García
Kia Telluride, disruptivo
Pocas veces un vehículo disrumpe tanto como el Kia Telluride que, desde su introducción en 2019, ha sido un éxito sin precedentes para la marca surcoreana. Según reportes del año pasado, algunos distribuidores lo vendían aproximadamente $5,000 dólares por encima del precio sugerido.
Tiempos de especulación
Si bien 2020 fue un año peculiar —por decirlo de alguna manera—, la industria automotriz se vio afectada por la falta de microcomponentes, por lo que había muy pocos de estos SUV disponibles. Recuerdo que converse con James Bell, jefe del departamento de relaciones públicas de Kia, respecto al incremento de los precios de los autos y él me comentaba que no podían hacer nada, ya que ellos solo sugieren los montos y depende del distribuidor el precio final (por lo general es menor que el costo sugerido, aunque en este caso y debido a las circunstancias era mayor).
Multilaureado
Tengo que decir que, a pesar de que el modelo tiene más de dos años en el mercado y ha sido multipremiado —en 2020 fue el auto del año por World Car y SUV del año por Motor Trend, entre otros reconocimientos—, nunca había manejado un Kia Telluride y en este caso fue el de 2021.
Al probarlo, me encontré con un vehículo refinado, con piel perforada en los seis asientos de la cabina, toques de alta tecnología como la pantalla de infoentretenimiento y muchas ayudas de seguridad al manejar; creo que mi favorita fue la visión lateral al poner las direccionales. Existe una versión con la pantalla digital de instrumentos, el SX, pero esta solo tenía una pantalla central de 3.5 pulgadas en medio de dos relojes análogos con velocidad y RPM.
Al volante del Kia Telluride
La experiencia de manejo fue agradable, ya que tiene seis modos: Eco, Confort, Snow, Sport, Smart y Custom. En este sentido, la pregunta obligada es ¿qué es Smart? Según Kia, se trata de un sistema que se ajusta a tus hábitos de manejo, como si fuera inteligencia artificial, aunque no fueron más lejos en su declaración.
El Kia Telluride viene con un solo motor de seis cilindros en V a gasolina que produce 291 caballos de fuerza. Al conducirlo en modo Sport pudimos sentir el poder de la máquina, aunque siendo sinceros, nadie compra un Telluride para jugar carreras en las calles; las personas lo adquieren por el confort y el espacio interior.
Espacio interior
El Kia Telluride tiene tres filas de asientos, pero como en todos los SUV de este formato, la gente tiene que decidir entre subir a muchos pasajeros o muchas maletas; las dos opciones son imposibles, ya que con la tercera fila activada el espacio de carga se vuelve pequeño. En el modelo probado tenía asientos tipo capitán en la segunda fila, por lo tanto, con la tercera fila abatida se convertía en un auto de cuatro pasajeros, algo que nos parece poco práctico para el uso diario y para todas las familias que tienen que transportar artículos de carga como equipamiento deportivo o insumos.
Rompiendo el segmento
Sería inútil negar el potencial de este SUV y la recepción que ha tenido entre el público: entre 2019 y 2020 se han vendido 133,733 unidades, nada mal si se toma en cuenta lo difícil que fue el año pasado. No obstante, en lo personal me gusta más el Volkswagen Atlas, pero el Kia Telluride es una excelente opción para familias o personas con necesidades específicas que busquen un auto de este calibre.
Para escoger
El precio inicial es de $32,190 dólares, que es realmente bueno para un vehículo que ofrece tanto. Por otro lado, el SX, el nivel más alto, inicia en $44,390 dólares, que tampoco es un mal precio para lo que brinda. El precio del modelo probado, con los paquetes que incluía, era de $49,215 dólares.
Para ser sinceros, nos gustó mucho, pero al ser una familia de tres, no la consideraríamos para comprarla.
